“Necesitamos más presencia policial”

Vecinos de la Avenida Brasil al 900 denuncian reiterados robos y venta de droga en un sector del barrio donde funciones tres instituciones educativas.
Con la salida de la convertibilidad (2003) las drogas encarecieron ostensiblemente. El mercado de los estupefacientes se reacomodó al nuevo escenario con sustancias más baratas (pasta base de cocaína-en adelante PBC o bien sus desechos) y devastadoras como el “Paco”.
Quienes comercializan este verdadero veneno por lo general buscan sitios con poca presencia policial o por lo menos con escasa intervención de la misma. Pareciera que un lugar ideal es la Avenida Brasil entre Bernardo de Irigoyen y Tacuarí; a una cuadra del Colegio Santa Catalina y a 100 metros de un destacamento de la Policía de la Ciudad.
La Policía de la Ciudad comenzó a funcionar a partir del lunes 2 de enero de 2017. Integrada por unos 25.000 efectivos fusionados entre la Policía Federal y la Metropolitana, arrancó al mando del polémico comisario José Pedro Potocar. (ver destacado)

Una buena noticia para el barrio en principio, pero con el correr de los meses, por lo menos para los vecinos de la calle Brasil al 900 no lo fue tanto. A partir de la integración el funcionario de la Policía Federal asignado a la cuadra no vino más por estos lares.
En febrero comenzaron a registrase más hurtos de lo normal en la vía pública (robos de carteras, celulares, billeteras, etc) mediante la modalidad del “arrebato”. Al mismo tiempo grupos de jóvenes que consumen pasta base fueron acomodándose en la puerta de distintas locaciones de la cuadra. Lo que parecía un fenómeno estacional de a poco se fue confirmando como un problema que llegó para quedarse. Sin presencia policial, los consumidores fueron haciéndose dueño la zona para luego sin ningún tipo de pruritos consumir en plena vía pública y en horario diurno.
Mariano V, vecino de la cuadra que prefiere no dar a conocer su identidad conversó con este medio sobre el “drama que está viviendo”. Junto a otros propietarios y comerciantes se autoconvocaron, primero a modo de reuniones de consorcio en los palieres de los edificios, cafés, etc. Crearon grupos de Whatsapp para estar mejor comunicados, radicaron denuncias en la Comisaría 16 (San José 1224) y comenzaron a asistir a las convocatorias institucionales sobre seguridad ciudadana (Ver: Foro de Seguridad en la Comuna 1), y hasta tuvieron la oportunidad de describir los hechos en la última visita del Jefe de Gobierno porteño al barrio de Constitución. Larreta en principio tomó nota.
Mariano asegura que los hechos delictivos tienen sus epicentros en los “hoteles o pensionados” de la calle Brasil 908 y 920 y un tercer inmueble en Tacuarí 1581. Desde estos lugares se expendería pasta base y otros estupefacientes las 24 hs. Continuando con el mismo relato, en cada uno de esos sitios, funcionarían “guardias” de personas vinculadas a la venta, “que reciben –del interior de los edificios referidos- y entregan –a los consumidores- la droga que se provee en esos lugares».
En el área de influencia de estos “puntos de venta” funcionan tres instituciones educativas: El solcito de Catalina (Brasil 827), el Instituto Felicia Ramón de Palacios (Brasil 882) y el Santa Catalina (Brasil 850). Cientos de chicos circulan diariamente por la zona y junto a sus padres a veces tienen que sortear momentos de alta peligrosidad.
“Cansados de tanta pasividad estatal el grupo de vecinos se sofistica y según Mariano V. arrancaron con algunas “investigaciones”. En ese sentido ya tendrían los nombres de los propietarios de los inmuebles en cuestión para intentar que se sumen a los reclamos”
El 9 de julio la justicia autorizó un allanamiento que significó la detención de algunos de los ocupantes, pero contra todos los pronósticos al otro día el descontrol se incrementó. La policía buscaba un tal “Brian” que parece no encontró.
“No estamos en contra de los consumidores, consideramos que son víctimas, pero detrás de ellos vienen momentos muy violentos” dice Mariano. Este joven profesional ya hizo tasar su propiedad de no mediar mejoras se mudará de barrio como tantos otros.-
«NOS SENTIMOS INDEFENSOS»
Alerta Militante entrevistó a uno de los vecinos damnificados quien prefirió no dar su nombre.
Cuando se habla de “paqueros” el vecino promedio entiende que son “pibes en situación de calle.
Pero no es así. Viene gente de todas las edades a comprar y consumir. Hace un tiempo pude ver a un hombre de más de 60 años, que encima, chicos de la cuadra lo molestaron y hasta le dieron una golpiza. Además vienen “clientes” de clase media que bajan de sus autos. En el Santa catalina funciona un comedor para personas en situación de calle y algunos meten en la misma bolsa y los considera a todos como delincuentes; y es injusto. No queremos que criminalicen a los consumidores.
Denuncias y visita en la comisaría 16, Foro de Seguridad comunal, y hasta un informe en persona a Larreta. ¿Con toda esta batería de iniciativas no hubo cambios?
Cuando llamamos al 911 denunciando consumo u algún intento de robo, etc; vemos que pasa un patrullero pero no mucho más. Sin embargo el último tiempo vemos que estos delincuentes están cambiando la forma de “trabajar”. Es como que utilizan a chicos que son los que hacen las entregas.
¿Cuál es la respuesta que les ofrece las autoridades policiales?
Bueno, muchas quejas sobre el funcionamiento de la justicia. De hecho la no intervención en los edificios nos dicen que tienen que ver con actuaciones judiciales demoradas. De todas maneras nosotros consideramos que la policía está de nuestro lado. Eso, sí…mientras se resuelven los expedientes judiciales necesitamos más presencia policial.
¿Tenés miedo?
Tenemos familia y nos sentimos indefensos. No queremos exponernos pero algo había que hacer. Nosotros creemos que se están disputando la zona de venta de drogas con los vecinos en el medio. A fines de junio hubo un tiroteo y quedaron los autos estacionados baleados. La última semana de julio también hubo un enfrentamiento entre ellos mismos con un herido. Pero la policía nunca llegó. Todo es rápido.
Reunión del “Foro de Seguridad” en Constitución
Estos foros fueron pensados para promover la “participación comunitaria en la formulación de propuestas, evaluación y seguimiento en materia de políticas públicas de seguridad”.
El último Foro de Seguridad de la Comuna 1 se realizó el lunes 14 de agosto a las 18.30 hs en la sede de Prefectura Naval Argentina en la calle Carlos Calvo 1337 y representantes de vecinos de “la calle Tacuarí entre Garay y Av Caseros (del 1500 al 1699) y de la Av. Brasil entre Piedras y Bernardo de Irigoyen (del 800 al 999)” presentaron el siguiente detalle de hechos delictivos a “modo de ejemplo” de lo que están sufriendo en los últimos tiempos:
*El 31/12/2016 a las 15 horas un vecino fue robado a mano armada en su vehículo Ford Focus y llevado a dar vueltas con el auto; le robaron todas sus pertenencias;
*el 12/04/2017 a las 19 horas uno de los vecinos sufrió el robo a mano armada de su vehículo VW Vento, patente JRF 751 en la puerta de Tacuarí 1517;
* el 28/06/2017 alrededor de las 23 horas, dos clientes de la cervecería ubicada en Tacuarí sufrieron el robo a mano armada de su vehículo;
*el día **/**/2017 alrededor de las ** horas robaron a mano armada en la óptica ubicada en la ochava de Tacuarí y Brasil, esquina noreste;
*el día **/**/2017 –domingo al mediodía- el bar ubicado en la ochava de Tacuarí y Garay sufrió un robo a mano armada;
* durante la madrugada del 21/07/2017, alrededor de las 4 horas, hubo una pelea entre “bandas” que se disputan el territorio de venta; ambos grupos tenían en su poder armas de fuego, armas blancas y hasta picanas;
* en la madrugada del 30/07/2017 una mujer sufrió el robo a mano armada de su vehículo;
*en la madrugada del 11/08/2017 robaron la carnicería ubicada en Tacuarí 1483;
*durante la madrugada del /08/2017 robaron la librería de Brasil 835;
* el día 01/03/2017 un vecino sufrió un robo con armas entre tres personas quien, luego de robarles el dinero, celular y pertenencias, le tiraron combustible y lo prendieron fuego en el pecho y cara, sufriendo heridas de gravedad.-