La norma crea un mecanismo que abarca a los casi 3000 edificios considerado por especialistas como los mas “representativos”. La iniciativa que se aprobó suspendió automáticamente la Emergencia Patrimonial en la ciudad. Además del nuevo polígono de preservación delimitado quedan en igual situación todos los edificios construidos antes del 31 de diciembre de 1941. Esto último significa que para demolerlos o reformarlos se tiene que implementar un trámite especial, que requiere de la autorización del Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP) Este Consejo fue creado por Ordenanza Municipal en 1998 se conforma por un representante de la Comisión de Planeamiento de la Legislatura, otro de la Comisión de Patrimonio, otro del Ministerio de Cultura porteño y otro de la Comisión de Preservación del Patrimonio Histórico Cultural de la Ciudad.
Las demoliciones de los edificios y demás construcciones históricas, por lo general son llevadas a cabo por modernos emprendimientos hoteleros.
La catalogación de 1100 edificios en el casco histórico porteño por parte del gobierno de la ciudad, asegurará a los edificios una protección integral. Además la nueva legislación incentiva a la restauración, y a la prohibición de demolerlos según sea le caso. La iniciativa contó con el apoyo de los legisladores Inés Urdapilleta, María Eugenia Estenssoro y Fernando Caeiro.
En la comisión de Cultura de la Legislatura comenzará el debate sobre la protección de los edificios más representativos de la ciudad, sobre la base del inventario y catalogación encarado por el Ministerio de Cultura.
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